Esto es a pesar de que el Comité de Justicia y Ciudadanía de Brasil aprobó PL 2.234/2022, que incluye casinos terrestres, bingo, jogo do bicho y apuestas en carreras de caballos.
La votación del Senado se ha pospuesto en numerosas ocasiones, más recientemente en julio, pero Irajá espera que la legalización del juego terrestre llegue más temprano que tarde para cosechar las recompensas financieras.
"Sin duda, esta discusión se trata de una agenda económica y social, no solo de entretenimiento para el país", dijo Irajá al medio de noticias brasileño ND Mais. "Crearemos un nuevo entorno empresarial en Brasil, que generará más de un millón de nuevos puestos de trabajo para el pueblo brasileño.
"Solo en impuestos, existe la perspectiva de recaudar al menos 20.000 millones de BRL y estos recursos se utilizarán para beneficiar a la población, dividida entre los estados, los municipios brasileños, la salud, la educación y la seguridad pública".
¿Podría el turismo duplicarse con la legalización de los casinos terrestres?
Más allá de los impuestos y la creación de empleo, Irajá también citó la mejora del sector turístico de bajo rendimiento de Brasil como una razón para legalizar el juego basado en la tierra.
En 2023, Brasil recibió alrededor de seis millones de turistas. La República Dominicana, por otro lado, recibió más de 10 millones de turistas, a pesar de que su masa de tierra encaja en Brasil alrededor de 175 veces.
"Nos enfrentamos a un tema que impulsará el turismo brasileño, que es lo que ha sucedido en todo el mundo", continuó Irajá.
"Los países que han legalizado el juego responsable han duplicado su flujo turístico en solo cinco años. Mientras tanto, Brasil observa a todos estos turistas de Europa, Asia y Estados Unidos, visitando Argentina, Chile y Uruguay, pero no vienen a Brasil para generar riqueza, circular recursos dentro de nuestro país y generar moneda extranjera".
Irajá también declaró que los juegos de azar basados en la tierra, a pesar de no ser legales, ya están muy extendidos en Brasil.
"La gran verdad es que el bingo, los casinos y el jogo do bicho, que son actividades de la cultura brasileña, ya operan fuera de la ley, operando en casi todas las ciudades de Brasil, en las capitales, en resumen, en las esquinas de las calles", explicó Irajá.
"Y el gobierno no recauda, el pueblo brasileño no recauda un solo centavo en impuestos, el gobierno no supervisa y no podemos proteger a los ciudadanos de este juego que yo llamo juegos de azar".
Dingnews.com 18/09/2025